Carta a Esperanza Aguirre

Querida Esperanza,

Y lo digo bien pues siempre te he tenido más simpatía que a ningún otro político. No he estado de acuerdo con todas tus decisiones, propuestas o declaraciones, pero me ha parecido siempre que tenías las cosas claras, que eras competente y que si alguien podía dirigir de manera adecuada este país eras tú.

Hoy circulando por la prensa digital me he tropezado con un editorial laudatorio en LibertadDigital escrito por Pércival Manglano acerca de un artículo publicado por ti en la página del PP. "Una declaración de intenciones". "... aboga por una profunda regeneración de la política". "Una transformación en profundidad del sistema". No he podido evitarlo y enseguida he pinchado en el enlace para leerlo. Ha llegado la hora. 

Me ha decepcionado.

¿Es que la solución al problema que tenemos en España con la casta política se reduce a cómo se eligen los representantes en los partidos? Te contaré un secreto a mí me importa exactamente un comino cómo se eligen los representantes de los partidos. Me da igual que escojan al más listo, al que tenga el mejor bigote, al que gane un sorteo o el que hable más idiomas. Me da igual... mientras sea consecuente, sea honrado, cumpla lo que prometa y asuma responsabilidades, pero de verdad. 

Yo también soy un admirador del sistema británico y cuando me junto con mis amigos y unas cervezas para arreglar este país siempre me deshago en loas a dicho sistema, pero... el problema no es ese. Da lo mismo que las listas sean abiertas, o cerradas, que se conozca apenas al primer nombre de la lista o ni eso. Da lo mismo, mientras nuestros dirigentes no se den cuenta que están representando a unas ideas, a unos principios y unos valores avalados por los votantes. Que no están ahí para pisar moqueta. Cuando voto, quiero que al que yo vote gane, pero sobre todo quiero que, aunque no gane, defienda los principios que se supone que representa. Creo que fue en Eslovenia donde el partido liberal que formaba parte del gobierno, lo dejó caer porque mantenerlo suponía incumplir su programa. ¡Qué envidia! ¿Cómo es el sistema electoral esloveno? No tengo ni idea, pero yo quiero un partido liberal así.

Tu "declaración de intenciones" me ha parecido pobre. Muy pobre. Pero supongo que no se puede esperar más de un partido que presume de defender una cosa en toda España y defiende cosas distintas en cada comunidad, no se puede esperar nada de un partido que incumple sistemáticamente su programa, de un partido que no respeta a sus votantes. ¿Recuerdas cuando Pedro Castro llamó tontos de los cojones a los votantes del PP? Estuvo muy mal, como lo está que el PP trate como tontos de los cojones a sus votantes a diario.

En fin, querida amiga, si esto es lo que quieres traer en tu vuelta a la política mejor te quedas con tu familia.

Un abrazo